miércoles,01 marzo, 2023
Un grupo de vigilantes de seguridad que trabajan en la planta fotovoltaica Berrocal de Gerena han estado sin cobrar sus nóminas durante dos meses. Estos trabajadores trabajaban para Urcon Security, una de las empresas implicadas en el caso Mersant, y ahora trabajan para otra empresa, Grupo Torneo, que ha asumido el servicio. Sin embargo, según los afectados, la empresa les «adeuda varias nóminas y se niega a cumplir el convenio colectivo».
Los trabajadores realizaron una protesta el lunes a las puertas de las instalaciones de la planta fotovoltaica en Gerena, y cuentan con el apoyo del sindicato CSIF, que ha pedido a la empresa que encuentre una solución rápida al conflicto. Según el sindicato, los trabajadores sólo quieren trabajar en condiciones dignas y que se les paguen sus nóminas.
Los afectados explican que, en lugar de subrogarlos en la planta fotovoltaica, la empresa se negó a hacerlo y argumentó que habían contratado con la constructora Siemsa a un precio muy bajo, y que sólo pagarían siete euros la hora, incluyendo el turno de noche, los festivos y las horas extra. Los trabajadores dicen que ni Urcon les paga las últimas nóminas, ni los despide, y que Grupo Torneo no los subroga.
Urcon Security era la empresa que asumió los servicios de Mersant Vigilancia, y era propiedad, a través de un testaferro, de un empresario de Carmona que la policía considera cabecilla de una trama de blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico. Este empresario adquirió Mersant Vigilancia como pago de una deuda de un millón de euros que había prestado a los propietarios de la empresa. Los dueños de ambas empresas fueron detenidos a finales de diciembre acusados de varios delitos, como blanqueo, alzamiento de bienes y pertenencia a organización criminal.
Esta situación refleja la precariedad laboral a la que se enfrentan muchos trabajadores del sector de la seguridad privada, especialmente en empresas implicadas en casos de corrupción y delitos financieros. Además, también muestra la falta de responsabilidad y cumplimiento de las obligaciones laborales de algunas empresas, lo que afecta directamente a los trabajadores que se ven obligados a luchar por sus derechos y sus salarios. La intervención de los sindicatos y las autoridades competentes es crucial para garantizar que los derechos laborales de los trabajadores sean respetados y se tomen medidas contra las empresas que incumplen la ley.
